La crueldad del dolor -gozar y sufrir, por gozar la propia personalidad consubstanciada con el dolor. El último refugio sincero del ansia de vivir y de la sed de gozar;
Amores crueles
Serás quien yo quiera. Haré de ti un ornamento de mi emoción puesta donde quiero, y como quiero, dentro de mí. Contigo no tienes nada. No eres nadie, porque no eres consciente; apenas vives.
Mi espíritu está […] como hacen los clásicos, y con lo que dicen los decadentes.