Escribir es olvidar. La literatura es la manera más agradable de ignorar la vida. La música arrulla, las artes visuales animan, las artes vivas (como la danza y la representación) entretienen.
La primera, sin embargo, se aleja de la vida porque hace de ella un sueño; las segundas, a pesar de todo, no se alejan de la vida -unas porque usan de fórmulas visibles y por lo tanto vitales, otras porque viven de la misma vida humana.
No es éste el caso de la literatura. Ésta simula la vida. Una novela es una historia de lo que nunca ha sido y un drama es una novela ofrecida sin narración. Un poema es la expresión de ideas o de sentimientos en un lenguaje que nadie emplea, puesto que nadie habla en verso.