Luego después del lanzamiento de "El Alquimista", debí pasar un tiempo fuera de Brasil. Vivía preocupado por lo que estaba sucediendo con el libro por aquí.
Un día, llegó a mis manos un texto a seguir. Y yo me encontré de nuevo conmigo mismo.
– "Su usted realmente fuese un niño, un verdadero niño, en lugar de preocuparse por lo que no puede hacer, contemplaría la Creación en silencio. Y se acostumbraría a mirar calmadamente el mundo, la naturaleza, la historia, el cielo".
– "Si usted realmente fuese un niño, estaría en este momento cantando aleluya para las cosas que están en frente suyo. Y libre de las tensiones, de los miedos, y de las preguntas inútiles, aprovecharía este tiempo para esperar, curioso y paciente, por el resultado de las cosas donde tanto envistió su amor". (Carlos Caretto, ermitaño italiano).