Литмир - Электронная Библиотека
Содержание  
A
A

4.

.

5.

,

.

6.

.

7.

.

8.

,

,

.

9.

!

La princesa Sac-Nicté3

Después de haber vivido diez siglos en la selva de América

Central, los mayas emigraron al Norte y fundaron en la península

de Yucatán tres ciudades: Chichén Itzá, Mayapán y Uxmal. Las

tres ciudades vivieron en paz y amistad por más de dos siglos y

ningún pueblo guerrero se atrevió a atacarlas.

Pero hay una historia triste de aquella alianza de paz. Se cuenta

que el joven rey de Chichén se enamoró de una princesa de

Mayapán y la robó el mismo día en que iba a casarse con el

príncipe de Uxmal.

La leyenda dice que había en Mayapán una bella princesa que

tenía el dulce nombre Sac-Nicté que quiere decir Blanca Flor.

Había también en las tierras de los mayas el príncipe Canek que

quiere decir Serpiente Negra. El joven era valeroso, duro y tenaz de corazón. Cuando Canek cumplió 21 años él se hizo rey de la

ciudad Chichén Itzá. El día en que Canek fue levantado a rey, el

3 Cuento adaptado del libro "Lecturas Ejemplares" de H. Almendros.

209

vio a la princesa Blanca Flor y se enamoró de ella a primera vista.

La princesa también al verlo por primera vez supo que su vida y la

vida del principe Canek correrían como dos ríos que corren juntos

hasta el mar. Pero por desgracia la princesa Blanca Flor ya había

sido destinada por su padre, el poderoso rey de Mayapán, para el

joven príncipe heredero del reino de Uxmal.

Pocos días faltaban para el casamiento. En la maravillosa ciudad

de Uxmal se preparaba la boda, toda la ciudad estaba adornada

de plantas y flores. De todas partes llegaban los invitados con

ricos regalos. Vinieron músicos y poetas. Todo el mundo danzaba

y estaba alegre porque nadie ^abía lo que iba a suceder.

Todo sucedió en un momento. Era ya el mismo día en que iban

a casarse la princesa Blanca Flor con el príncipe de Uxmal. El rey

Canek llegó a la hora que había de llegar. Con sesenta de sus

guerreros principales él entró de pronto en medio de Uxmal,

arrebató a la princesa en sus brazos delante de todos y pasó como

un relámpago. Así Canek robó a la princesa.

Poco tiempo después la poderosa ciudad Mayapán se juntó

con Uxmal, y juntos se volvieron contra Chichén Itzá. Los

habitantes de Chichén dejaron sus casas y sus templos y

abandonaron la bella ciudad situada a la orilla del agua azul.

Todos se fueron para salvar sus vidas. Delante de los itzaes iba el

rey Canek, a su lado iba la princesa Blanca Flor. Ella levantaba la

mano y señalaba el camino, y todos iban detrás.

Por fin llegaron a un lugar tranquilo y verde, junto a una laguna

quieta, lejos de todas las ciudades. Y allí fundaron su reinado,

edificaron las casas sencillas y cultivaron las tierras. Se salvaron

así los itzaes por el amor de la princesa Sac-Nicté, que entró en el

corazón del último príncipe de Chichén para salvarlo del castigo y

hacer su vida pura y blanca.

Mientras tanto, la hermosa ciudad Chichén Itzá quedó solitaria

en medio del bosque. Cuando llegaron los numerosos ejércitos de

Uxmal y Mayapán, no encontraron ni los ecos en los palacios y en

los templos vacíos y decidieron incendiar la ciudad. Así se dio fin

a la brillante y sagrada Chichén Itzá y el bosque creció y cubrió las

ruinas de la antigua riqueza. 210

Vocabulario

• atreverse

• robar vt

• serpiente(f)

duro adj

,

tenaz de corazón

por desgracia

destinar vt

heredero m

• adornar vi

suceder vi

,

• arrebatar vt

,

relámpago m

• abandonar vt

,

señalar vt

• quieto adj

,

castigo m

•eco

incendiar vf

Responde a las preguntas:

1. ¿Dónde fundaron los mayas sus nuevas ciudades después

de haber vivido por diez siglos en la selva?

2. ¿Qué quieren decir los nombres de la princesa Sac-Nicté y

del príncipe Canek?

3. ¿Cómo era el joven rey de Chichén Itzá?

4. ¿Por qué Canek decidió robar a la bella princesa?

5. ¿Cómo los habitantes de Chichén Itzá salvaron sus vidas?

Traduce:

1.

.

2.

,

.

211

3.

,

,

,

,

.

4.

,

,

,

,

.

5.

-

.

6.

15

,

-

.

7.

.

8.

.

9.

,

.

10.

,

.

Encuentro de Don Quyote

con Dulcinea del Toboso4

Después de haber estado cerca de un mes en su casa, don

Quijote decidió salir de nuevo en busca de aventuras, pero ante

todo quiso dirigirse al Toboso y saludar a la señora de sus

pensamientos, a la encantada Dulcinea. Esperó a que llegara la

noche para entrar en su pueblo, y acompañado por su fiel escu-

dero Sancho Panza anduvo por el Toboso en busca del palacio de

Dulcinea. Pero todo era en vano y al amanecer se retiraron a un

bosque cercano.

4 Fragmento adaptado del libro "Don Quijote" de Miguel de Cervantes Saavedra.

212

Al día siguiente Sancho propuso a Don Quijote que esperara

en el bosque y que le dejara ir sólo al Toboso a buscar a Dulcinea.

Don Quijote accedió y Sancho se puso en camino. Pero en vez de

entrar en el pueblo, se sentó Sancho al pie de un árbol, lejos de su

amo y allí estuvo descansando todo el día. Pensó que su amo

siendo un poco loco y tomando unas cosas por otras, como había

sucedido con los molinos de viento, fácilmente creería que una

labradora cualquiera era la señora Dulcinea.

Cuando, por la tarde, Sancho se levantó para subir en el asno, vio

que se acercaban hacia donde él estaba tres labradoras sobre tres

borricos. Entonces, se dirigió de prisa a buscar a su señor Don Qui-

jote y le dijo que montara sobre Rocinante, pues iba a entrevistarse

con Dulcinea, que se acercaba acompañada de dos doncellas.

Salieron del bosque. Don Quijote tendió los ojos por todo el

camino del Toboso y como no vio más que a tres aldeanas se

quedo extrañado, y así se lo dijo a Sancho.

Sancho Panza replicó que no eran tres labradoras sino Dulci-

nea acompañada de dos doncellas, y que iban montadas no en

borricos, sino en tres caballos blancos como la nieve y que era

imposible que los caballos le pareciesen burros.

- Pues yo te digo, Sancho amigo - dijo Don Quijote -, que es

tan verdad que son burros o burras, como yo soy don Quijote y tú

eres Sancho Panza.

Sancho insistió en sus afirmaciones y adelantándose a recibir

a las aldeanas se puso de rodillas ante una de ellas y le dijo:

- Reina y princesa de la hermosura, reciba a su caballero que

no es otro que el ilustre don Quijote de la Mancha, llamado por

otro nombre el Caballero de la Triste Figura.

Miraba Don Quijote a la que Sancho llamaba reina y princesa,

pero no veía en ella más que una aldeana y no de muy buen

rostro, la cual dijo mal humorada:

- "Apártense del camino y déjennos pasar, que vamos de

prisa".

Sancho insistió aún en que se detuviera para hablar con el famoso

caballero andante, y don Quijote, dirigiéndose a la que creía

36
{"b":"272635","o":1}