– ¿Qué tal gato Sylvester ?
Parpadeó. Contraseña errónea.
– ¿Gilligan ? ¿Little Buddy ?
Se mostró aburrido, luego se instaló sobre mi regazo disponiéndose a descansar.
– ¿Samantha ?. ¿Endora? ¿Tabitha ? --Ni siquiera sabía si era gato o gata. Lo levanté para averiguarlo cuando oí un sonido en la ventanilla al lado de mi oreja.
Me di la vuelta sorprendida y me encontré con una porra de policía. Una pistola enfundada en su pistolera. Redondas esposas cromadas colgando de un ancho cinturón. Sentí pánico y levanté la mirada hasta dar con la chapa brillante de un policía de Filadelfia.