Mi madre encontró el nombre de «Wei» en un antiguo diccionario chino. Es un carácter olvidado hace mucho tiempo que significa «sol».
En China, el apellido antecede al nombre. Las mujeres no adoptan el apellido de su marido, sino que conservan el suyo propio. En el caso de los niños y las personas de entre veinte y treinta años a menudo se utiliza el prefijo «Xiao», que significa «pequeño». El prefijo «Lao», que equivale a «viejo», se utiliza con frecuencia para las personas de más de cuarenta años, o bien como muestra de respeto. «X» se pronuncia «sh», «Q» es «ch» y «Zh» es «ge» (una «g» de sonido débil, no fuerte).
Los nombres de los personajes públicos, incluidos los líderes estudiantiles, así como los de mi familia, son reales, y están escritos en pinyin tal como se utiliza en China. Otros nombres están cambiados.
Todos los personajes de este libro están basados en seres de la vida real. Los detalles de sus historias se han cambiado para proteger a dichas personas. Algunas conversaciones del libro son necesariamente imaginarias o reconstruidas; pero reflejan con fidelidad el clima de la época, los temas acerca de los que discutíamos, cómo nos sentíamos y mis recuerdos de los acontecimientos descritos. Otras conversaciones se basan en informes publicados.
Siempre que me ha sido posible he verificado lo que recordaba sobre los sucesos de 1989 con documentos publicados. Hubo dos publicaciones que me resultaron particularmente valiosas y que recopilaban artículos de periódicos, reportajes de televisión y emisiones radiofónicas, discursos, algunos minutos de reuniones, comunicados de prensa, transcripciones de ruedas de prensa y comunicados internos del Partido: Beijing Spring, 1989: Confrontation and Conflict, M. Oksenbert, L. R. Sullivan y M. Lambert, eds., M. E. Sharpe, Inc. (Armonk, Nueva York, 1990); y Los documentos de Tiananmen, Zhang Liang, A. J. Nathan y P. Link (eds.), Little, Brown and Company (Londres, 2001).
Te amo fielmente
A pesar del paso de los años
De la juventud que envejece
Te amo
En lo más profundo de mi corazón
Las flores del bosque pierden el color
Demasiado deprisa
La vida… siempre un río que fluye con fuerza hacia el este
Espero que volvamos a encontrarnos otra vez
Un día como éste
Una época como ésta
Y el mismo tú
El sol y la primavera
Quizá también el mismo yo…
Tal vez
Diane Wei Liang Pekín, 1989