Ciertas religiones orientales piden a sus miembros que pasen el día entero cantando el mismo versículo sagrado. Quien haya visto algún grupo de Hare Krishna en la calle, sabe que ellos repiten -sin parar-un corto fragmento de alabanza a Dios.
La "plegaria de la respiración" consiste en repetir mentalmente, durante la mayor parte del tiempo, una frase de la Biblia. De esta manera, logramos vaciar la mente de toda tensión, y traemos hacia lo cotidiano la presencia de Dios.
Estoy haciendo esto, por ejemplo, cuando escribo estas líneas. Y en vez de distraerme o confundirme, ella está abriendo mi corazón para el Espíritu Santo. Aquel que se queja de que "no tiene tiempo para rezar", debe experimentar los efectos sorprendentes de esta plegaria.