IX Canto las cualidades del más excelente Guru del océano de paz, del limpiador de los pecados de la laguna de néctar. Los yoguis y los yangams cantan al profundo océano de firmeza y sabiduría. Al él cantan Indra, el Bhagat Prahlada y todos los que conocieron la dulzura de su propio espíritu. Gloria al Raja-Yoga enseñado por Guru Nanak. El Universo entero descansa a sus pies de Loto. JAP-JI En el principio estaba el Ser Verdadero. ¡Oh Nanak! El preside el comienzo de cada era. Siempre fue, es y será. I Con el pensamiento no podrás conocerle, ni aunque cien mil veces pienses en El; tampoco le descubrirás por el silencio, ni aunque permanecieras mudo vidas enteras. Mil destrezas podrás obtener en este mundo, pero sólo con un corazón de niño podrás alcanzarle. II Por su voluntad todo fue creado, todas las formas, todas las cosas; sin embargo, su voluntad jamás podrá ser explicada. Por su voluntad unos son ensalzados y otros humillados. Por su voluntad unos gozan y otros sufren; unos son liberados y otros se pierden en reencamaciones sin fin. ¡Oh Nanak! Si los hombres comprendieran su voluntad, no hablarían con orgullo. III Unos cantan su poder y otros los misterios insondables de su amor. Innumerables son los que han tratado describirle, mas El está más allá de toda descripción. El, que ha creado el cuerpo del hombre, en un instante lo reduce a cenizas. ¡Oh Nanak! Su voluntad se manifiesta en gloria y libertad. IV Verdadero es el Señor y verdadero Su Santo Nombre. Su amor es infinito, está más allá de toda alabanza. ¿Qué rodemos pronunciar con esta boca que, a oírlo, no atraiga su compasión? Si en las horas benditas del amanecer meditas en su Santo Nombre, tus anhelos serán saciados y se te abrirá la puerta de la salvación. ¡Oh Nanak! Reconoce que en todas las cosas El es la única verdad. V
El no puede ser moldeado por forma alguna, pues es el Creador de las formas. Quienes le adoran ganan su compasión, pues en su boca vibra el sonido eterno de la Palabra. El es los Vedas y las escrituras, Vishnu, Brahma y la madre Parvati. Palabras que le describan son vanas de buscar. ¡Oh Nanak! Escúchame bien: Si tu corazón guarda por El un poco de amor, desterrará de ti todo sufrimiento y traerá la paz a tu corazón. VI Si a Elle complace, me bañaré en el Ganges; si no fuera así, ¿qué ganaría con ello? ¿Acaso existe deseo alguno, fuera de su voluntad, que no acarree su destino de futuras acciones? Sólo si escucho los mandatos de mi Guru, obtendré la liberación. ¡Oh Guru! Permite que el dueño y Señor de todos los seres vivos no sea olvidado por mi corazón. VII Aunque durase la vida las cuatro edades del mundo y aún por diez se multiplicase; aunque fuese conocido en los nueve planos de la creación y todos ellos me obedecieran; aunque todas las criaturas me rindieran elogios; y obtuviese fama en todo el mundo, si la mirada compasiva de Dios no se posara sobre mí, sería tan sólo gusano entre gusanos, desprecio de pecadores. ¡Oh Nanak! Aquel que ha creado la humildad otorga su favor sólo a sus devotos; nadie más puede complacerle. VIII Escuchando Su Palabra fueron creados los dioses y santos; Escuchando Su Palabra los siete continentes, los siete cielos y los siete paraísos fueron formados; escuchando Su Palabra el hombre alcanza la sabiduría y la muerte cesa de existir. ¡Oh Nanak! Tal es el poder de la Palabra. |