Литмир - Электронная Библиотека

Eran unos electricistas bastante competentes y excelentes ingenieros civiles. Su química parecía bastante buena, lo que resultaba en cierto modo sorprendente para una raza cuyos químicos dependen principalmente de la vista. La astronomía, naturalmente, era casi inexistente, y las disciplinas más profundas de la física estaban fuera, de momento, de su alcance. Poseían elementos radioactivos, pero por supuesto que no tenían la mínima idea sobre la causa de su comportamiento.

Por supuesto, muchas de las preguntas de los humanos enigmaban a Dar, y en algunos casos esto no era debido a su ignorancia de la ciencia humana. Por lo que podía decir, los hombres estaban intentando averiguar lo que pensaban estos Profesores sobre la gente de Dar, esto es, si les gustaban, les respetaban, les odiaban como a inferiores, o si simplemente les contemplaban como una pequeña aunque importante molestia. Dar recordaba que uno de los seres allí presentes había alegado amistad con él debido a vínculos de sangre, aunque no podía decir por su vida cómo se había determinado dicha relación. Esta pregunta también se le ocurrió al biólogo, que era de los que habían estado escuchando cuando la intercepción de la primera conversación radiofónica de Kruger con el Profesor y había posteriormente pedido una traducción. En cierto modo, para sorpresa de Dar, el Profesor tenía una respuesta.

— Preparamos las circunstancias o al menos la localización de la muerte de muchos de nuestros antepasados. Dentro de poco tiempo, la gente de este poblado será obligada a dirigirse al cráter donde Dar y Kruger estuvieron tiempo atrás atrapados; allí podemos observar la muerte y el principio de las nuevas vidas, pudiendo seguir la pista de quién es descendiente de quién. También preparamos morir nosotros en los sitios preseleccionados cuando la época «fría» está a punto de comenzar, tratando de aprender de los Profesores «fríos» la situación de varios lugares donde sus nuevos grupos son capturados al comienzo de su época de vida: salen al descubierto para cazar nueva gente, que en aquella época no son sino animales salvajes.

— Supongo que no conseguirán capturar unos cuantos.

— Efectivamente, por lo que podemos decir. De vez en cuando aparece un miembro de nuestra raza, o incluso a veces un pequeño grupo, cuyo padre debe haber sobrevivido toda la estación fría en plan de animal salvaje; al menos no tenemos ningún registro suyo.

— ¿No sabe cuántos hijos tiene una persona determinada?

— Es casi imposible decirlo, ya que depende de cosas tales como su peso.

— Pero eso no parece variar demasiado.

— Durante la vida normal, no, pero en el momento de morir uno puede haber sufrido la falta de comida durante mucho tiempo, o por otra parte haber comido mucho y recientemente; todo depende de las oportunidades. Es también imposible decir si alguno de los niños han sido comidos por animales salvajes antes de ser capturados, en el caso de la gente de Dar Lahg Ahn, ya que no cuidan verdaderamente de ellos como nosotros.

— Ya veo.

También Dar, por buena que fuera su memoria, recordaba poco de su breve existencia antes de ser «capturado», y lo poco que recordaba estaba ocupado por lo que el Profesor dijo. Se preguntó la razón de que sus propios Profesores no tomaran precauciones al igual que éstos, dándose cuenta después de que no tenían oportunidad; o la gente «caliente» debería cooperar, lo que no parecían dispuestos a hacer, o su propia raza tendría que mantener a un grupo de los otros bajo control durante el período caliente, como hacía esta criatura con los habitantes del poblado durante el frío. Esto parecía, por decirlo finamente, difícil; la otra raza estaba lo suficientemente delante de ellos técnicamente para tener un control casi completo de la situación. Dar empezaba a sospechar que este Profesor no dijo toda la verdad; había más razones aparte de su personal desaprobación de la ciencia detrás de sus objeciones a la introducción de la sabiduría humana.

Este pensamiento se fue desarrollando en su cabeza conforme avanzaba la conversación, dando origen a otros. Fue Dar Lang Ahn, después de que el robot empezara a regresar al módulo, quien hizo la sugerencia de que contactaran con algunos otros Profesores de las regiones calentadas por volcanes y les hicieran unas preguntas; e incluso Kruger, quien le conocía mejor que cualquier otro ser humano, no se dio cuenta de lo que el otro quería exactamente descubrir.

XIV. BIOLOGÍA; SOCIOLOGÍA

Una y otra vez Abyormen giró alrededor de su órbita, que casi era semejante a la de un cometa, y más y más cercano, Theer emanaba sus llamas. Abyormen, muy despacio, se iba calentando. Para sus nativos esto era asunto de poco tiempo; la temperatura no había llegado aún al punto capaz de activar las bacterias cuyo proceso biológico llenaría la atmósfera de nitrógeno. Hasta que eso sucediera a la gente de Dar les importaba poco que los océanos de su planeta se helaran o hirvieran.

La temperatura tampoco importaba a los científicos humanos. La mayoría de ellos habían estado llevando desde el principio unos trajes protectores muy complejos que virtualmente les aislaban del medio. Sin embargo, sabían que pronto sería necesaria más protección. Experimentos con la vida nativa, usando no sólo bacterias, sino también animales y plantas lo suficientemente grandes para ser observados directamente, les habían dicho lo que debían esperar.

Kruger estaba más que satisfecho con la situación. Su amigo había sido completamente absorbido por la fiebre de adquirir conocimientos de los visitantes humanos. Kruger no podía siempre quedarse con él, pero ya no le importaba eso. Si había algo cierto era que Dar Lang Ahn tenía recogida ya información suficiente para poder transmitirla toda a sus Profesores antes del final de la vida normal. No habría más alternativa que él se quedara detrás del cobertizo debajo del casquete de hielo cuando éste fuera cerrado, lo que significaría quedar convertido automáticamente en Profesor.

Una o dos veces la conciencia del chico le remordió un poco; se preguntaba si no habría sido más legal explicarle a Dar lo que significaría necesariamente todo el tiempo que había pasado con sus visitantes humanos. Cada vez que pensaba en ello, sin embargo, conseguía convencerse de que el nativo era lo suficientemente mayor para saber lo que estaba haciendo.

De cualquier forma, no hubiera estado de más que hubiera sacado el tema a colación.

Aunque los científicos humanos pudieran, por supuesto, trabajar en la época caliente, sus acciones serían mucho más pesadas. Por tanto, estaban intentando conseguir la información básica antes de que ocurriera el cambio. Dar contemplaba dentro de lo posible todo lo que pasaba; Kruger perdió mucho entusiasmo después de ver una de las pruebas biológicas.

Esto ocurrió después del descubrimiento de la reacción en cadena que el calor producía en la bacteria. Una muestra de tierra del planeta había sido utilizada para cubrir el suelo de una cámara herméticamente cerrada donde se habían introducido también varios animales del tipo de los que Dar y Kruger encontraron en el cráter. También crecían varias plantas nativas; los biólogos habían tratado de reproducir en miniatura el medio ambiente del planeta. Hecho esto, procedieron a ir elevando la temperatura gradualmente, para minimizar las oportunidades de que un impacto del calor complicara la situación.

La cámara se hallaba lo suficientemente aislada para impedir que el vapor se concentrara en sus paredes, con lo que era posible ver lo que pasaba dentro. Parte del agua, por supuesto, estaba aún en estado líquido, ya que al hervir el resto había aumentado considerablemente la temperatura; y casi de repente, un metro empezó a subir de la posición cero.

Este era simplemente un galvanómetro, pero estaba montado en serie con una resistencia consistente en una pequeña y abierta redoma de agua dentro de la cámara. La resistencia del líquido estaba bajando y ninguno de los presentes dudó del motivo. En unos segundos se hizo evidente, incluso a simple vista, ya que la atmósfera de la cámara adquirió un débil pero inconfundible color marrón rojizo. La bacteria estaba operando; se estaban formando óxidos de nitrógeno, que hacían que se volviera ácida cualquier agua que pudiera estar aún presente en forma líquida, y haciendo algo todavía mucho más drástico a la vida en la cámara.

39
{"b":"109393","o":1}