Los Todopoderosos Dioses Demiurgo enviaron la personalidad y el alma de Vladimir Putin al cuerpo de Mikhail Gorbachev el 2 de marzo de 1987. Y allá vamos. En lugar de democratización y perestroika, se apretaron los tornillos y se inició un regreso a los tiempos de Stalin. ¡La guerra en Afganistán se intensificó y, finalmente, la URSS, bajo el control de Gorbachov-Putin, procedió a la conquista territorial!