El libro que sigue abriendo corazones y tocando las fibras de sus lectoresLos padres proyectamos en nuestros hijos nuestras expectativas de vida, nuestras frustraciones, nuestros problemas sin resolver de la infancia o adolescencia, nuestros ';si hubiera' y nuestras necesidades insatisfechas, esperando inconscientemente que ellos se conviertan en una extension de nosotros mismos y que cierren esos asuntos inconclusos. Conocer la ';parte oculta' de nuestra relacion, comprender por que ese hijo, especficamente ese, nos saca tan fcilmente de nuestras casillas, por que lo presionamos con tal insistencia para que haga o deje de hacer, nos abre la puerta a la posibilidad de un cambio profundo en nuestra relacion con el. Darnos cuenta de esto contribuye a transformar los sentimientos de rechazo, rencor y su consecuente culpa, que pueden resultar devastadores, facilitando el paso al nico sentimiento que sana, une y transforma: el amor.