Muchas personas consideran cubiertas sus necesidades de consulta
o apoyo lingüístico con un buen diccionario de la lengua o,
más aún, con un diccionario enciclopédico. Y generalmente es
así cuando se trata de la lectura de distintos materiales de estudio,
trabajo o entretenimiento, ya que estos diccionarios nos permiten
conocer el significado exacto de una palabra o sus distintas
acepciones (significados).
Sin embargo, si somos nosotros los que tenemos que escribir dicho
material o preparar una exposición oral sobre un tema, la situación
cambia.